imágenes sin resolver

Imaginen que hoy soy visto apoyando una manifestación en pro de los derechos de los homosexuales y me pronuncio defendiendo una ley que los acoja y proteja civilmente.
E imaginen que mañana mismo salgo en la televisión dando besos y abrazos a la matriarca del clan Humala. Sería inusual y contradictorio.

La posición de Carlos Tapia, expresada en sus declaraciones es igual de inusual y contradictoria. Él mismo, como analista político lo debería reconocer. El malestar que ha generado dentro de los miembros de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación – entre ellos Susana Villarán- es totalmente válido. Sus contradicciones pueden ser enumeradas.

Tapia confía incomprensiblemente en que Ollanta Humala pondrá en práctica el programa integral de reparaciones a las víctimas de la violencia ya que un grupo con escasísima votación – se refiere a la izquierda- no podría garantizar nada en la práctica. Él, como la mayoría de peruanos no apeló al voto por convicción sino por mayoría. Perteneciendo a la izquierda no podía confiar en ninguno de los grupos ni apoyar candidaturas con 0.2% de intención de voto (refiriéndose a Javier Diez Canseco). Era un voto perdido así que decidió apoyar al ex -militar. Todo por la izquierda. Cree que el pueblo de izquierda votó por Humala. Entonces ahí confirma su consecuencia y responsabiliza a los que no han sabido representar verdaderamente a la izquierda. Se excusa en que el Informe de la CVR no responsabiliza por ningún lado a Humala. Confía en el abogado de Humala, Carlos Escobar, que ha dicho que su defendido es inocente. ¿Se imaginan a un abogado manifestando que su defendido es culpable? Pues Carlos Tapia cree ciegamente en la palabra del abogado de Humala. Excusa su confianza confirmando que el abogado fue premiado por la Coordinadora de Derechos Humanos que paradójicamente es quien ha pronunciado un informe serio y documentado sobre los hechos que comprometen en Madre Mía al candidato Humala. Pero Carlos Tapia considera poco probable que su líder, Ollanta Humala, haya cometido crímenes de lesa humanidad.

Acusa de no tener sentido ético a Susana Villarán y él mismo, luego de haber formado parte de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación manifiesta que su posición política en favor de Ollanta Humala no afecta ni compromete en absoluto ni al Informe ni a la Comisión de la Verdad y la Reconciliación y eso es falso. Se equivoca totalmente. Es contradictorio y estúpido que habiendo defendido a una población afectada por la violencia política y terrorista ahora la descalifique pronunciando que no hay pruebas contundentes que confirmen que Ollanta Humala cometió abusos y torturas en Madre Mía. La Comisión que conformó trabajó con muchos relatos y manifestaciones de gente que había sufrido las consecuencias de la violencia en sectores terriblemente afectados, con una cantidad enorme de inocentes asesinados. Ahora él mismo sale a descalificar los relatos y manifestaciones de la gente en Madre Mía que ha reconocido al Capitán Carlos en la persona de Ollanta Humala.
El fue calificado para defender a una mayoría afectada por la violencia política y hoy la descalifica. Hoy descalifica lo que en su momento defendió. Hoy descalifica a quienes en su momento le tocó defender con el Informe.

Carlos Tapia confía y cree que el ex comandante Humala ha actuado con honor, que no ha violado ningún derecho humano y que ha sido fiel servidor de la lucha por la pacificación.
Carlos Tapia como ciudadano libre que se manifiesta puede apoyar a un candidato acusado de cometer delitos contra los derechos humanos de una población y que además se inclina por un modelo directo de la dictadura y el velasquismo y el chavismo sin citar demás defectos; pero como miembro- porque lo sigue siendo- de la CVR, es lamentable lo que pronuncia porque con sus declaraciones involucra definitivamente no solo su trabajo individual sino también a la Comisión y el Informe en el que participó. Afirma que desde hacer tres años ya no existe la Comisión de la Verdad y la Reconciliación. ¿Y el informe? Afirma que desde el momento en que se entregó el informe la Comisión de la Verdad y la Reconciliación ya no existe.

Susana Villarán tiene razones para su arrepentimiento.

Tapia acusó a Susana Villarán de aprovechar y politizar el caso Madre Mía criticando a su líder Ollanta Humala con intención electoral. La acusa de no haber actuado por convicción en la defensa de los derechos humanos e incluso declara que Susana no tiene sentido ético.
Hay que aclarar que Susana Villarán viajó sola a Madre Mía sin prensa ni medios de comunicación, solo la acompañó una camarita de La Ventana Indiscreta y la cobertura del acto fue mínima. Nadie se enteró porque como ha sido usual, Susana Villarán no hace del espectáculo su estilo. Y creo que el viaje lo hizo por convicción.

Carlos Tapia afirma que la izquierda ha logrado construir en el país un pueblo izquierdista. ¿Reconoce alguno de ustedes al Perú como un pueblo izquierdista?
Resulta lamentable en alguien que ha militado 40 años en la izquierda. E insiste, aun con estas declaraciones, en llamarse izquierdista.